EL SISTEMA LINFÁTICO

CANALES DE LINFA

El sistema linfático está formado por los órganos linfoides y por kilómetros y kilómetros de vasos linfáticos. De vez en cuando, los vasos linfáticos se ensanchan y constituyen los nódulos o ganglios linfáticos. Hay ganglios linfáticos repartidos por todo el organismo humano, aunque presentan agrupaciones destacadas en cuello, ingles, axilas y en otros puntos más internos del cuerpo. 

Los vasos y los órganos que constituyen el sistema linfático tienen asignado un papel muy importante en el reciclaje de los líquidos corporales, así como también en la defensa ante los agentes externos.

VASOS Y LINFA

Los vasos linfáticos son los conductos por donde circula la linfa. Están tapizados por una delgada capa de células epiteliales o endotelio. También disponen de válvulas que impiden el retroceso de la linfa. Los vasos mayores se subdividen repetidas veces hasta los finísimos capilares linfáticos.
Los capilares son delgados canales ciegos. Recogen las partículas grasas del líquido intercelular que resultan demasiado grandes para difundirse a las células.

Los vasos linfáticos forman una tupida red de transporte de la linfa, independiente de los vasos sanguíneos. 

Todos los vasos linfáticos convergen ya sea en el conducto linfático derecho, que se vacía en la vena subclavia derecha, ya sea en el conducto linfático izquierdo, que lo hace en la vena subclavia izquierda. En el cuello, ambas subclavias desembocan en la vena cava superior, antes de su ingreso en la aurícula derecha del corazón. Los vasos linfáticos contienen linfa. La linfa tiene una composición similar al plasma sanguíneo.

Sus componentes básicos son el agua y las sales, hormonas y enzimas, partículas de grasa, desechos celulares y linfocitos. Éstos, que combaten las infecciones, se forman en los órganos linfoides, situados aquí y allá en todo el sistema linfático.

ÓRGANOS LINFOIDES

Ganglio de axila e ingle.

Los ganglios linfáticos tienden a agruparse en algunas regiones del cuerpo. En las axilas y las ingles se concentra un gran número de ganglios linfáticos, fácilmente palpables en el transcurso de una enfermedad infecciosa e incluso durante un largo período de convalecencia.

LAS AMÍGDALAS: son cuatro órganos linfoides, situados en la parte posterior de la boca y de la lengua. El timo se halla en el tórax, entre ambos pulmones. Es un órgano muy grande hasta la pubertad, pero se atrofia desde entonces. Es el órgano de diferenciación de los linfocitos. 

LOS GANGLIOS LINFÁTICOS: son los órganos linfoides más importantes. Se trata de engrosamientos que, de trecho en trecho, forman los vasos linfáticos. En estos ganglios, la linfa se filtra y se limpia de impurezas, microorganismos y células muertas.

Ganglio linfático

Sección de un ganglio linfático. Se aprecia una cápsula fibrosa y el tejido linfoide. Este tejido produce los linfocitos, que son las células responsables de la defensa del organismo y de la respuesta inmunitaria.